Kids-Larry Clark

Poster de Kids-Larry Clark

Hoy, Lunes 17 de Febrero se me ha venido a la cabeza Kids, la perla independiente americana de 1995. He decidido revisitarla y hacer un análisis. Dirigida por Larry Clark, escrita por Harmony Korine y producida por Gus Van Sant (tres grandísimos nombres en el cine indie estadounidense), Kids es una cinta que más que entretenernos nos expone algo. Es una pringosa y mugrienta ventana por la que vemos un día en la vida de unos adolescentes neoyorquinos en 1995. Fue la ópera prima de Larry Clark, a pesar de contar con más de veinte años de experiencia en el campo de la fotografía. Podemos reconocer aspectos de Kids en sus anteriores trabajos, como el retrato del abuso de sustancias y la juventud callejera en Tulsa, su libro de 1971. De igual manera, fue el debut de Harmony Korine en el séptimo arte. Este tan solo tenía diecinueve años cuando redactó el guión de la película, cosa que (sin ánimo de ofender) podemos advertir a lo largo de toda la producción. Aunque Kids no obtuvo grandes galardones, pero recibió el premio a la Mejor Película Extranjera en los Premios César en 1996 y Premio del Público en Sundance de 1995, donde la cinta tuvo una muy positiva acogida. Kids es un filme crudo, no teme abordar temas incómodos de manera directa. Los temas tratados y más bien, como son tratados pueden no ser del agrado de todos, lo que la hizo un largometraje algo controversial. Más adelante abordaré los motivos de su controversia. La grabación comienza con una escena previa a los créditos de apertura, en la que se muestra a Telly (interpretado por Leo Fitzpatrick) y a una chica teniendo relaciones. Esta escena nos adelanta y nos presenta ciertas características del filme que veremos posteriormente. La escena carece de música, lo que la da un halo de aspereza e incomodidad. No hay sentimientos reales. No hay amor. Es una interacción puramente física guiada por el ansia por parte de él y la inocencia por parte de ella. Tras eso, Telly se reúne con Casper (personaje encarnado por Justin Pierce) y pasean por las calles de Manhattan. Algo que me ha fascinado es el sonido ambiente en las escenas callejeras. Es el sonido natural que encuentras al ir por el barrio, ya sea el lower east side o carabanchel alto: los coches, voces de gente hablando, gritando, tablas de skate, pasos apresurados, lentos… Creo que esto le da un enfoque muy no-tratado y no edulcorado a la narrativa audiovisual y nos hace mucho más fácil sumergirnos en las calles y entender la atmósfera de la historia. Basándonos en sus conversaciones, empezamos a atisbar y a definir la personalidad y la forma de ser de los personajes. Son adolescentes despreocupados, ignorantes y controlados por el hedonismo juvenil. Cabe felicitar a Korine, que logra un guión realista, aunque en momentos cae en repeticiones y en un lenguaje algo forzado. Sería perfecto si no tratase de demostrar todo el rato lo marginales que son los personajes y se relajara un poco, así derivaría en algo más creíble. Kids, 1995 Ulteriormente, sucede una de mis escenas predilectas en la película en la que hace aparición por primera vez un personaje clave en la obra. Vemos a un grupo de unas siete chicas conversando distendidamente en una habitación. Gritan, se ríen, se mueven… La buena sensación es hasta palpable. Las principales protagonistas de esta secuencia son Ruby (Rosario Dawson) y Jenny (Chloe Sevigny). Un elemento que disfruté mucho es que la historia contada en Kids sucede en un plazo menor a 24 horas. Esto está muy presente justamente en esta parte, pues la escena de los chicos (Telly y Casper) y la de las chicas en la habitación, estaba sucediendo simultáneamente. En ambas escenas están compartiendo anécdotas sexuales y da un matiz divertido y dinámico el ver el contraste y diferencias en el ambiente de ellos y ellas. Tras eso, vemos a Ruby y Jenny en una clínica de salud sexual. Están allí por Ruby, pues teme que pueda haber contraído una ETS fruto de su imprudencia (piedra angular del filme). Jenny también se hace pruebas para acompañar a su amiga por el proceso, pero tras los resultados se revierte la situación y se revela que Ruby está limpia, pero Jenny está infectada de SIDA. Kids es un retrato nihilista de la adolescencia, la sexualidad, la marginalidad y la vida. A veces entramos en un bucle de algo que podría ser o bien disociación o bien todo lo contrario. Nada importa, el ahora es lo único que tenemos. Nuestros instintos más básicos afloran y la única salvación son los placeres carnales. Esta cinta tiene una gran dualidad, porque podemos ver este bucle desde dentro (los personajes de la película y sus acciones) y desde fuera, que nos hace darnos cuenta de que nuestras acciones realmente tienen consecuencias. Y esas consecuencias nos afectan directamente. Jenny no anticipaba para nada su diagnóstico, pues ella solo había tenido relaciones con un chico en su vida: Telly. A partir de este punto, la película irá alternando escenas que siguen al personaje de Leo Fitzpatrick con otras que narran la trama de Jenny, que ahora busca a Telly por las calles para comunicarle la noticia. Los chicos esa tarde callejean por el barrio, roban, fuman hierba y van al parque de skate, donde le pegan una paliza sin piedad a un chico de por allí, hasta dejarlo al borde de la muerte. Esa me pareció una escena bastante destacable, porque vemos un comportamiento grupal casi tribal, en el que la violencia parece surgir de forma irracional, convirtiendo la escena en una de las más perturbadoras del filme. Este pasaje está acompañado por Casper the Friendly Ghost de Daniel Johnston, lo que le da un sello cotidiano que inquieta. En cuanto al personaje de Chloe sevigny, está perdida. Busca a Telly por las calles, sin resultado. Con una mirada que mezcla desesperación, irracionalidad y absoluto desaliento. Alguien le dice que la persona a la que busca se halla en una discoteca y ella va allí. Esta escena es de mis favoritas. Ya es de noche y se mezcla la luz nocturna con los artificiales focos del club. La música rave de los 90 suena saturada. La banda sonora del proyecto es sublime, mezclando temas de hip hop y música callejera de la época (beastie boys, a tribe called quest) con rock alternativo. Nos transporta a una atmósfera perfecta, muy urbana adolescente y cohesionada. Las piezas originales para la obra también son bastante buenas, realizadas por The Folk Implosion, acompañan bien a la trama y aportan emoción. Volviendo a la discoteca, vemos a montones de jóvenes bailando y en el medio Jenny, puesta de éxtasis, quieta, impotente. La iluminación le da valor a esta escena, juega con los colores de las luces de discoteca, el contraste y la oscuridad y la hace muy bella visualmente. También en el club nocturno hay un breve cameo de Harmony Korine, que le da éxtasis al personaje de Sevigny. Jenny comprende que Telly no se halla allí, y una chica le informa de su paradero. Este se encuentra en casa de un amigo, donde se celebra una pequeña fiesta. Jenny por fin llega a la casa, completamente devastada, casi no se tiene en pie. En cuanto al adolescente interpretado por Fitzpatrick, ha invertido la tarde flirteando con una niña. En este punto de la pelicula, se encuentran en una habitacion de la casa teniendo sexo. Esta parte me tocó emocionalmente, porque Telly repite todas las cosas que le había dicho a la chica de la primera escena, pero ahora se las dice a esta niña. Que la quiere, que le gusta mucho, etc. Y la niña hace las mismas preguntas que la anterior: me quieres? De verdad te importo? Y el chico responde exactamente lo mismo: Claro que te quiero, no te estoy usando, estaré aquí para ti. Entonces Jenny irrumpe en la habitación y les ve. Ellos no la ven a ella. Es demasiado tarde, ahora ya hay dos personas más contagiadas por culpa de la irresponsabilidad y la ignorancia que Telly representa. La fiesta ya está en su punto más bajo. La gente está dormida, sobrepasados por las drogas. Un grupo de niños se pasan un porro. Este detalle es importante, porque se ve que todo esto es un patrón generacional que se repetirá una y otra y otra vez, sin remedio alguno porque es a donde la marea de gente que es la sociedad empuja a la marginalidad. El filme acaba con una escena desgarradora. Jenny se desploma en un sofá tras ver a Telly con la otra chica,y Casper la viola mientras está inconsciente. Esta escena no me gustó demasiado, para ser sincera. Creo que habría estado bien si hubiera sido mucho menos explícita e infinitamente más corta de lo que acabó siendo. Se siente como si su principal fin fuese shockear al espectador y escandalizar con lo incorrecto y lo morboso, deleitándose con la situación. En general esa premisa se aplica a muchas partes de la película, lo cual es en parte repulsivo (los personajes son menores de edad), eso es lo que principalmente genera la controversia de la que os advertí tiempo atrás. Las actuaciones eran en su mayoría satisfactorias. Destacando el trabajo de Chloe Sevigny, que ha hecho una interpretación arrolladora y realista al extremo (también estaba preciosa), de Rosario Dawson, que a pesar de contar con un tiempo reducido en pantalla, ha aportado mucha naturalidad y energía a su personaje. Y por último a Justin Pierce, que realiza una interpretacion impecable y bastante creible, que logra constuir un personaje interesante a diferencia de Leo Fitzpatrick. Como conclusión, diría que kids es una cinta perfecta para transportarnos a otra realidad. Tanto cotidiana como extraordinaria al mismo tiempo, nos lleva a las calles de Nueva York y nos expone el panorama adolescente del momento (a veces siendo algo exagerada, lo que resta credibilidad) y la cruda y difícil situación de el virus del SIDA y de perderse en el presente y olvidar que el futuro y las consecuencias existen. 8,3/10